Recordar, es un gran ejercicio sin duda.
Reencontrar personas que han sido y son importantes en tu vida, y con ell@s reencontrar sensaciones y sentimientos, revivir situaciones y caer en la cuenta de que tu inexperiencia o ignorancia acerca de la vida, era efectivamente muy osada.
Compartir, vivencias conjuntas mencionando lugares o personas que no están y que fraguaron un pasado que solamente puedo definir como feliz.
Reconocer y agradecer a quien lo merece, que haya estado ahí durante tu juventud más tierna, y que se mantenga cerca para poder refugiarte en los momentos disfrutados.
Éste fin de semana ha sido para mi, no solamente una exaltación de la amistad, en la cual he notado la falta, por lo menos, de una persona que estará en la próxima.
También ha sido un breve momento durante el cual me he sentido rejuvenecer y he deseado ser tan ingenuo e inexperto como antes fui.
Esas ganas de que la noche no acabe, y que tan pocas veces sucede...
Gran plan, el juntarnos en torno a una mesa con un buen whisky y hablar, cosas transcendentes e intranscendentes, sabiendo que nadie de los presentes juzgará lo que digas, porque te conocen desde hace mucho, quizás desde que sembraron en tu persona algunas de las semillas que habrían de convertirte en la persona que ahora eres.
Recordar, Reencontrar, compartir, reconocer y agradecer, algo que solo me apetece con mis amigos, los de verdad.
Gracias chic@s por la noche del sábado, y a quien faltó... Que no vuelva a suceder, te he echado de menos.
martes, 16 de junio de 2015
Recordando
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